Endulzar el café es un tema que puede levantar pasiones, pero no hay motivos de qué preocuparse porque al final se trata de una opción muy individual y que va en función de la persona que lo toma. Las opciones para endulzar el café son muchas, pero los expertos en nutrición y estilo de vida saludable alertan sobre los riesgos de usar en exceso azúcares cuyos daños tengan grandes repercusiones sobre la salud del cuerpo humano.
Más allá de lo que digan los expertos sobre lo sano o no de endulzar el café, lo importante está en saber encontrar un punto de equilibrio. El café disminuye la posibilidad de sufrir enfermedades neurodegenerativas, así como de padecer diabetes, contiene nutrientes que ayudan a mantenernos alertas, a optimizar nuestro rendimiento físico y a quemar grasar. Que no sea el azúcar el protagonista de una buena taza de café, una bebida cuyas propiedades, podrían quedar eclipsadas por los edulcorantes.
¿Imaginas tomar 400 mil millones de tazas de café? Eso es lo que se consume a escala mundial, según las estadísticas. Más de 125 millones de personas en el mundo viven del cultivo del café, lo que lo ubica como una de los sectores económicos más importantes. Países como Colombia, Vietnam, Brasil, Honduras, Etiopía, Indonesia, entre otros, tienen a este cultivo como una pieza fundamental de sus ritmos de mercado; en ellos endulzar el café, también es un debate diario.
Varias opciones para endulzar el café
Endulzar el café es una decisión absolutamente personal, así como las opciones para hacerlo. Hay quienes optan directamente por el azúcar, pero otros escogen la miel, el sirope de agave, la canela, la azúcar de caña integral, panela, azúcar mascabado. Los puristas del café recomiendan no usar ningún tipo de edulcorantes, pues estos tienden a alterar las propiedades del sabor del café, además de que resulta mucho más saludable y menos adictivo.
Las personas más preocupadas por su salud escogen, hoy en día, algunas formas de endulzar el café que pueden afectar menos el cuerpo. Pasta o aceite de coco, leche del almendra o avena, vainilla en polvo, pasta de aguacate, salsa de manzana, cebolla estofada y, por supuesto, la canela o la nuez moscada son de las opciones más empleadas para suavizar el sabor amargo de un buen café, también son estas de las más saludables.
Endulzar el café y sus repercusiones a la salud
Se puede endulzar el café sin azúcares ni edulcorantes, para evitar graves consecuencias sobre la salud. Los expertos en nutrición alertan que, además de las características adictivas del café, deben tomarse en cuenta las propias de los azúcares, que pocas veces son tomadas en cuenta. Muchos de los edulcorantes artificiales que más se usan para el café pueden traer consecuencias sobre el índice glucémico afectando directamente el funcionamiento del páncreas.
Algunos científicos aseguran que endulzar el café, tras caer en la adicción a los azúcares, hace que las personas comiencen a incluir otros azúcares ocultos en otros platos o bebidas de manera inconsciente. Los riesgos de incluir el azúcar en la dieta diaria hacen que los índices de salud tengan cifras de alarma en muchas partes del mundo, por lo que una forma de evitar caer en las estadísticas es recurriendo a endulzantes naturales o mejor, prescindir de ellos paulatinamente.